«Telarañas». Marujita Restobar

Limpia las telarañas, aquellas que no te dejan mirar hacia otro lado.

Reinvéntate , cuando creas que te sientes anclado.

Tira la basura, porque cuando empieza a oler, molesta, y sí, aunque creas que no puedes desprenderte de ello, puedes, tíralo,porque es un trasto inservible que no te aporta nada positivo, despídete, no hace falta que lo recicles, tíralo y olvida.

Traduce trasto a pensamiento, hábito, compañías o lo que te de la gana…

Cuando te estanques, respira, limpia tu caja de todo lo que no sirva y empieza de nuevo, tantas veces cómo quieras, el límite lo pone la vida… Y, el objetivo, es ser feliz.

Cajita de trastos… Beiconcillo. 

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Juernes, en el restaurante La Chulapa de Alcalá.

Nana

Duérmete pronto mi amor

Que la noche ya llegó

 

Y cierra tus ojos que yo

De tus sueños cuidaré

Siempre a tu lado estaré

 

Y tu guardián yo seré

Toda la vida

Si un día te sientes mal

Yo de bien te llenaré

 

Y aunque muy lejos estés

Yo a tu sombra cuidaré

Siempre a tu lado estaré

 

Y tu guardián yo seré

Toda la vida

Esta noche

Te prometo que no vendrán

Ni dragones ni fantasmas a molestar

 

Y en la puerta de tus sueños yo voy a estar

Hasta que tus ojos vuelvan a abrir

 

Duérmete mi  amor sueña con mi voz

Duérmete mi amor hasta que salga el sol

Duérmete mi amor sueña con mi voz

Duérmete mi amor que aquí estaré yo

 

Tu guardián. Juanes

 

 

Hoy, de camino al trabajo, venía escuchando esta canción  y pensaba: ¡Que bueno es tener alguien a quien poder abrazar y dormir susurrando esta nana!. Y también lo es, saber que a ti te han cantado, no esta, pero sí tantas otras, porque eso significa que te han querido tanto como tu quieres ahora.

 

En un mundo como esté, que está tan loco y pasan tantas desgracias cada día, querer y sentirte querido es la mayor felicidad que podemos tener. A veces, se nos olvida que no hacen falta tantas cosas para ser feliz. Querer, sentirte amado y poder darte de vez en cuando algún pequeño capricho no me parece una mala fórmula de la felicidad.

 

Mi capricho de esta semana, una cena con mi marido. ¿Donde?, en La Chulapa de Alcalá, Madrid.

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